
Los estudiantes del CRyA Gisela Ortiz (maestría), y Sergio Dzib (doctorado), usando antenas de radio ubicadas en Estados Unidos, detectaron una región de gas chocado en la constelación del Cisne. Esta región forma parte de un intrincado sistema múltiple de estrellas, unas orbitando alrededor de otras. En particular, Gisela y Sergio se enfocaron en un sistema binario de contacto, llamado así porque las dos estrellas están tan cerca la una de la otra que sus atmósferas se llegan a tocar. Este sistema es orbitado por una tercer estrella, más débil. El viento estelar de las primeras dos es tan fuerte que alcanza al viento de la tercer estrella, muy cerca de donde ésta se ubica, y lo hace arquearse alrededor de ésta en lo que se denomina la "región de viento chocado". En esta región los electrones se aceleran a velocidades cercanas a las de la luz y, al interactuar con el campo magnético, despliegan una emisión muy característica en radiofrecuencias, la cual nos permite determinar las propiedades físicas de la región.

En un trabajo publicado en 2008 por investigadores de diversas partes del mundo, y en donde colabora la Dra. Paola D’Alessio del CRyA, se estudió de manera detallada la estrella LkCa 15 usando observaciones del Telescopio Espacial Spitzer, que observa en luz infrarroja. Esta estrella recién formada, apenas unos 2 millones de años de edad, tiene un disco de gas y polvo a su alrededor. Sin embargo, en dicho estudio, los investigadores encontraron que este disco tiene una brecha, una especie de canal circular. Este tipo de canales se espera que se formen debido a la posible presencia de un planeta que orbita la estrella en cuestión, y que en su recorrido atrapa el material del disco, formando así la brecha.

La Dra. Estela Susana Lizano Soberón fue designada por el rector José Narro Robles como directora del Centro de Radioastronomía y Astrofísica (CRyA) de la UNAM, para un segundo periodo (2011-2015).

Observaciones a lo largo de varios años del telescopio espacial Spitzer han mostrado que algunos discos protoplanetarios tienen un brillo variable tipo "subibaja": cuando aumenta la emisión en 5 micras, disminuye la emisión en 38, y viceversa.

En colaboración con astrónomos belgas, el estudiante Jesús Alberto Toalá desarrolló modelos tridimensionales de la estructura en vientos de estrellas masivas utilizando el código de transferencia radiativa WIND3D. Con esto logran reproducir las características observadas en espectros en el ultravioleta en líneas de Silicio de la estrella HD 64760.