Utilizando observaciones de alta resolución de e-MERLIN y el VLA, un grupo de investigación del IRyA dirigido por Adriana Rodríguez-Kamenetzky observó el chorro de radio que emana de una protoestrella en la constelación de Serpens (la Serpiente), detectando movimientos en escalas inferiores a 100 unidades astronómicas (au).

Los objetos estelares jóvenes (Young Stellar Objects, YSO) son estrellas en las primeras etapas de su evolución, conocidas por expulsar chorros estrechos de gas que se ven en ondas de radio. Todavía no se comprende bien cómo se vuelven tan angostos y cómo son arrojados, ya que ambos procesos ocurren en escalas de unas pocas au. Para revelar la contribución relativa de cada proceso, se necesitan observaciones utilizando radio interferómetros de alta resolución, es decir, es necesario un alto nivel de detalle en las regiones cercanas a las protoestrellas.

En este trabajo, el chorro de radio en la región de formación estelar de Serpens se observó durante varias épocas utilizando el arreglo e-MERLIN de siete observatorios de radio en Gran Bretaña, así como el arreglo de radio antenas VLA en Nuevo México, Estados Unidos. Este chorro es expulsado de un YSO con aproximadamente 3 veces la masa del Sol. Por primera vez, para una protoestrella de tal masa, se detectaron movimientos en escalas inferiores a 100 au, gracias al poder de resolución de e-MERLIN. De hecho, la región central del chorro de Serpens se pudo observar con una resolución de ~15 au, distinguiendo varios componentes. Esto permitió el cálculo de la velocidad del chorro, que resultó ser muy variable durante 10 años de observaciones. Esta variabilidad apunta a variaciones episódicas de la tasa de acreción, es decir, la tasa a la que el material de la región cae sobre la protoestrella. La velocidad del chorro inferida de ~100 km/s sugiere que fue lanzado desde las regiones más internas del disco de acreción alrededor de la protoestrella.

 

La imagen muestra los “nudos” de radio en el chorro de Serpens observados con e-MERLIN en dos épocas diferentes, con 1.4 años de diferencia entre sí. Las estrellas rojas muestran la posición que se considera es la ubicación de la fuente del chorro. Las líneas discontinuas unen las posiciones de los nudos en las dos épocas. Crédito: Adriana R. Rodríguez-Kamenetzky et al. 2022, The Astrophysical Journal Letters, 931.

Los investigadores del IRyA que participaron en este estudio incluyen a Adriana R. Rodríguez-Kamenetzky, Carlos Carrasco-González, Luis Felipe Rodríguez, Roberto Galván-Madrid y Susana Lizano.

Artículo de investigación: Rodríguez-Kamenetzky et al.
The Astrophysical Journal Letters, 931, L26
https://iopscience.iop.org/article/10.3847/2041-8213/ac6fd1

Texto adaptado por el IRyA UNAM de la e-MERLIN User Newsletter, Número 1, 24 de enero de 2023